Para poder gatear, el niño debe aumentar la fuerza muscular de la espalda, hombros, brazos y piernas para poder soportar su propio peso. Además, es necesario que coordine y alterne los movimientos de brazos y piernas y desarrolle el equilibrio. Escanear es una habilidad compleja.
Por lo tanto, cada niño tiene su propia forma de aprender a moverse, y no todos gatean de la forma tradicional: avanzando sobre manos y rodillas. Hay otros estilos de gateo: algunos bebés gatean sobre su estómago o trasero, gatean hacia un lado como cangrejos, se paran sobre manos y pies como osos, o incluso usan una rodilla para apoyarse y empujan con la otra pierna recta.
Juegos estimulantes
La mejor forma de aprender con los niños es jugando, por eso te recomendamos algunos juegos para motivar al bebé a gatear:
- Gatear junto a él puede verte e imitar tus movimientos.
- Aleja de él su juguete favorito para que vaya a buscarlo
- Pon un espejo delante del niño para que vea su reflejo para que quiera acercarse a ver Será mejor que te agarres también al espejo.
¿Por qué es importante que un bebé gatee?
Para un bebé gatear es importante porque es la primera forma de movimiento independiente. Ayuda a desarrollar el sistema vestibular, que está relacionado con el equilibrio. También facilita el paso de información de un hemisferio a otro, lo que resulta en un mejor desempeño cognitivo y emocional.
El gateo es el tiempo más largo en que tu bebé pondrá todo su peso sobre sus manos, lo que desarrollará fuerza y estabilidad en sus hombros. Esto te permitirá tener control manual para otras habilidades como:
¿Qué debo hacer si mi bebé no gatea?
El escaneo no es esencial. No es una fase obligatoria en el desarrollo de un niño, de hecho no son pocas las personas sin ningún tipo de patología que no se ha colado en su vida.
Efectivamente la tabla Haizea-Llevant, que sirve de guía para el diagnóstico precoz de posibles retrasos en el desarrollo psicomotor de los niños, no incluye el gateo e incluye otros hitos de esa edad que se consideran más importantes y habituales, como sentarse solo o pararse con apoyo.
Como ya he señalado, es algo que depende de cada niño. Pero para que un bebé gatee naturalmente cuando su propio desarrollo lo considere oportuno, debe tener la oportunidad de hacerlo.
¿Qué significa esto? Que, cada vez con más frecuencia, al niño no se le da la oportunidad de gatear o gatear. El crecimiento del bebé se produce sin que se le dé el tiempo suficiente para jugar y sentarse en el suelo para que de forma natural pueda empezar a gatear y/o gatear.